
Secador de pelo eléctrico además de secar el cabello, también moldea el cabello, lo mantiene y tiene otras funciones.

Por lo tanto, la selección de un secador de pelo eléctrico es una cuestión técnica. ¿Existe algún método, habilidad o estándar para la selección de un secador de pelo eléctrico?
¿Qué parámetros debo elegir para un secador de pelo eléctrico?


Se deben considerar principalmente la velocidad, el ruido y la vida útil de estos aspectos. Cuanto mayor sea la potencia del secador de pelo eléctrico, mejor. A mayor potencia, mayor velocidad y mayor volumen de aire. Sin embargo, debido al tamaño, el peso y el ruido, la potencia del secador de pelo eléctrico será muy limitada. Por lo tanto, con un volumen, peso y ruido razonables, cuanto mayor sea la potencia, mejor.

Después de todo, el volumen de aire puede determinar la velocidad del secado del cabello, que es la función principal de un secador de pelo.

La velocidad de los secadores de pelo disponibles en el mercado varía entre diez mil y decenas de miles de revoluciones, y se dice que una marca reconocida puede alcanzar las 110.000 revoluciones. El ruido siempre ha sido un problema para los secadores de pelo. Debido a las limitaciones tecnológicas, actualmente no existe una solución fiable. Ni siquiera las marcas reconocidas con motores inverter de ultraalta velocidad pueden reducir el ruido en funcionamiento. La buena noticia es que la impresión general del usuario es que los secadores de pelo son extremadamente ruidosos, por lo que no hay que preocuparse demasiado por elegir un modelo que reduzca el ruido, a menos que exista un producto que cambie por completo la percepción del usuario.
Lo último a tener en cuenta es la vida útil del motor.


Gracias a las propiedades del conmutador, la vida útil del motor de CC con escobillas no es excesiva. El límite es de miles de horas, mientras que el límite teórico del motor de CC sin escobillas puede alcanzar décadas.
Además, al seleccionar un motor para un secador de pelo eléctrico, se deben tener en cuenta otras restricciones como el coste, el tamaño del espacio y las funciones especiales.